Es la bebida más popular del planeta después del agua. Y, por méritos propios, el café -tomado con moderación- se ha puesto en la lista de los alimentos saludables. ¿Por qué razón? Lo explicamos ahora, como asimismo desvelamos la forma más sana de tomarlo.
Según los últimos estudios, tomar entre tres y cinco tazas pequeñas al día de esta infusión puede distanciar el peligro de padecer diabetes tipo dos y protege tu corazón. Incluso existe evidencia científica que sostiene que el café previene la enfermedad de Parkinson. Y por si no fuera suficiente con lo anterior, una investigación publicada en JAMA que analizó su efecto en quinientos personas concluyó que tomar café puede ayudarte a vivir más años.
¿Unas virtudes exageradas? Conforme los expertos, no. Y a algunos incluso les sabe a poco.
Web principal , catedrático de Nutrición y presidente de la Fundación De España de Alimentación (FEN), añade algún beneficio más: puesto que "sus granos forman una buena fuente de ácido clorogénico -explica-, el café nos resguarda contra ciertos tipos de cáncer y reduce la aparición de piedras en la vesícula". Además de esto, nos pone de buen humor.
Café con moderación
Eso sí, para disfrutar de sus efectos sin peligros, hay que beberlo de forma moderada: un máximo de entre 3 y cuatro tazas cada día, según Varela, cada una de entre 60 y 80 miligramos de cafeína por toma.
Y también resulta conveniente tener en cuenta que el café no nos sienta a todos igual: al tiempo que para algunos tres tazas diarias están bien, otros no aceptan más de dos, una o aun ninguna. El médico de atención primaria Mariano de la Figuera también resalta las ventajas de las sustancias antioxidantes que contiene, mas recuerda que existe "una contestación individual a la tisana". Por servirnos de un ejemplo, la cafeína se absorbe de forma más lenta en las personas mayores, que deben reducir el consumo.
De ahí que, la Fundación De España de Nutrición alarma del peligro de tomarlo en demasía, de manera especial, si tienes inconvenientes de hígado. En un caso así, recomienda no exceder las 2 tazas.
¿Natural, torrefacto o bien mezcla?
Capuchino, vienés, solo... ¿Cuál es el mejor? Obtener todos las ventajas de esta infusión resulta más complicado que solicitar un cortado o un café con leche. Para exprimir al límite sus propiedades saludables hay que aprender a distinguir los tipos de grano y sus tuestes.
Café natural. No lleva más ingredientes que los granos de café recogidos y tostados. Este grano tiene más aroma, resulta más suave y asimismo es menos amargo que el tueste del café torrefacto.
Café torrefacto. A lo largo de su proceso de tueste se agrega azúcar, lo que crea una capa caramelizada. El problema está en que el café torrefacto puede llevar hasta un quince por cien de azúcar, un añadido extra a tu consumo de este nutriente, cuyo exceso está desaconsejado por los expertos.
Café mezcla. Como su nombre dice, se trata de una tisana que combina granos de torre natural con otras semillas tostadas con azúcar.
Para elegir el más saludable, los especialistas coinciden: cuanto más natural, mejor. Así que opta por el natural. "El café sin manipular aporta polifenoles y sustancias antoxidantes útiles para la salud, sin agregar lo negativo del azúcar", apunta De la Figuera.